Los montaplatos para restaurantes son un tipo de elevadores que, tal y como su propio nombre indica, están especialmente diseñados para el transporte de platos y pequeños objetos, generalmente desde la cocina hasta otras plantas en el ámbito de la hostelería.
La cabina es de pequeñas dimensiones, con una altura que en la gran mayoría de casos oscila entre los 80 y los 100 centímetros. Es interesante destacar que queda a la altura de la encimera de la cocina para mayor comodidad de los empleados.
Montaplatos para restaurantes: eléctricos e hidráulicos
Se pueden diferenciar dos tipos de montaplatos para restaurantes.
Por un lado, los eléctricos, en los que el contrapeso y la cabina están unidos por una serie de cables de acero. En este caso el movimiento se acciona mediante un motor eléctrico y todo el sistema está controlado por un cuadro electrónico. La capacidad de carga de la gran mayoría de modelos es de entre 60 y 90 kilos, y la velocidad de desplazamiento puede alcanzar los 50 centímetros por segundo.
Y, por otro lado, los montaplatos hidráulicos. La energía necesaria para el desplazamiento viene dada por una bomba y por un motor eléctrico. La bomba se encarga de inyectar un fluido hidráulico que eleva a un cilindro conectado mediante un conjunto de cables a la cabina.
Cuando el montaplatos va a subir, el motor y la bomba inyectan el fluido hidráulico, provocando así una presión en el interior del pistón, que empuja la cabina junto con la carga hacia arriba. Pueden alcanzar hasta los 12 metros de altura sin ningún problema.
Independientemente del modelo seleccionado, es importante incorporar todas las medidas de seguridad, como puertas con sistemas electromecánicos o cerramiento en todo el recorrido. En Multielevación somos una empresa experta en soluciones para eliminar cualquier barrera arquitectónica para particulares y empresas. Para cualquier consulta, puedes contactar con nosotros.
